Amor por internet (IIparte)@@@@@@@
Juan entró en la cafetería y enseguida se dio cuenta de quién
podía ser Elisa. No era como él la había imaginado, pero seguía estando en su
primera fase del enamoramiento. Sabía que a Elisa le encantaba todo lo que le
contaba de él, desde su dinero hasta el lujo con el que vivía. Pero él no
quería una mujer a su lado que lo quisiera solo por su dinero. Y fue cuándo
ideó mentirle. Contarle que no era un rico empresario para ver cómo reaccionaba
ella.
Juan, era
fontanero, y tenía una empresa con 1500 empleados, repartida por toda España.
Si era fontanero, pero se había logrado un futuro muy esperanzador. Había
trabajado muy duro durante muchos años, y su pequeña empresa había ido
creciendo poco a poco. Su ingenio y sus ganas de salir adelante le habían
llevado a ir ampliando su negocio e ir poniendo pequeñas sucursales donde no
solo se ofrecían fontaneros, si no electricistas... albañiles....al final su
negocio fue creciendo y creciendo y ahora era un empresario que vivía muy bien,
aunque a él le gustaba seguir trabajando de cuando en cuando y no delegar todo
en manos ajenas. Juan pensaba que él que tiene un negocio tiene que cuidarlo
como a un hijo y estar siempre pendiente de él. La verdad, es que él con sus
empleados tenía mucha suerte, pues eran muy buena gente y aunque Juan los
trataba muy bien, ellos le correspondían. Eran gentes trabajadoras y
cumplidoras, quizás por eso su negocio iba viento en popa.
Un día se dio
cuenta de lo solo que estaba en la vida y decidió meterse en internet a buscar
pareja. Quizás no era la forma más adecuada que había conocido pero si la más
cómoda, por lo que se puso manos a la obra. La primera intentona fue Elisa, que
visto lo visto, la olvidó en menos de que canta un gallo. Esa mujer solo lo
quería por su dinero, y eso si que no lo admitía. Después pasaron otras que
solo querían pasar el rato, hasta que conoció a Eva. Eva era distinta a las
demás y pronto se dio cuenta. Volvió a repetir la misma escena que con Elisa y
Eva reaccionó de distinta forma: le dijo que no le importaba lo que él fuera,
que ella estaba enamorada de él. Con el paso de los meses se fueron a vivir
juntos y Eva pudo comprobar que efectivamente era un rico empresario. Pronto
Eva se puso a trabajar con él ayudándole en la administración de la empresa y
juntos fueron viendo como su empresa iba viento en popa a pesar de la crisis.
Bajaron los precios y añadieron nuevas ideas para su negocio y así iban
consiguiendo mantener a todos sus empleados. Eva, logró trabajos en el
extranjero y así fueron capeando el temporal hasta que la crisis fuera pasando.
Un día, tomando
café Juan y Eva, se encontraron en la cafetería a Elisa. Elisa tomaba café
sola, leyendo el periódico y cuándo vio a Juan, lo miró de arriba abajo y pensó
que ese no era el hombre que había conocido ella...se parecía pero este iba
mejor vestido. Juan, viendo que Elisa no lo reconocía se paró a hablar con
ella.
- Hola Elisa, soy
Juan, tú amigo de internet. Te presento a mi mujer, Eva, que la conocí poco
después que a tú.
Elisa los miraba
estupefactos, pues por la forma de vestir de los dos, las cosas le debían de ir
muy bien. Se atusó su pelo revuelto con cierta vergüenza y se puso los zapatos
por debajo de la mesa. Tenía los pies hinchados y le dolían. Se había
descalzado y no quería que la vieran. La pareja olía a perfume y ella olía a
trabajo.
- Cambiaste mucho
Juan, casi ni te reconozco.
- No Elisa, no
cambié nada. Sencillamente quería saber que era lo que te interesaba de mí y lo
vi muy claro.
Elisa se sonrojó y
Eva, conocedora de la historia, quiso meterse en el medio de la conversación:
- Juzgaste
demasiado pronto. Juan es un buen hombre, trabajador y honrado. Me dejaste el
camino abierto a mí Elisa, gracias a tu rechazo yo conocí a Juan y somos muy
felices, tengo que estarte agradecida.
Elisa no creía lo
que estaba oyendo. ¡Juan era un rico empresario! No le había mentido...solo
había jugado con ella para saber sus intenciones y tonta de ella....se había
descubierto a la primera.
Si usted quiere saber lo que una mujer dice realmente, mírela, no la escuche.
Oscar Wilde (1854-1900) Dramaturgo y novelista irlandés.
Ay mi niña!... no me ha gustado mucho el comportamiento de Juan.
ResponderEliminarEstá claro que es un modo de conocer las intenciones de la otra persona,(en este caso las de Elisa) pero no deja de ser una media verdad o una mentirijilla.
Creo que a las personas se las ve venir... cuando a alguien solo le interesa el físico, la posición social o alguna de estas condiciones se ve a la legua.Tal vez no en una primera cita, pero si lo unico que te interesa es la superficialidad, esa, cuesta muy poco que salga a la luz.
Bueno, la cosa es que al menos esta vez terminó bien la historia cibernética.
Y es que como te dije en su dia, no siempre tiene que salir mal.
A mi me hace mucha gracia y me resulta raro que alguien de la blogosfera utilice esa frase tan manida de... ¿y que esperabas de internet, es mejor cara a cara? o eso de que en internet no puedes encontrar ninguna relación buena...(sin ofender a nadie, he puesto un ejemplo un poco en general)
Pero me resulta curioso, porque al fin y al cabo nosotros también navegamos constantemente por Internet y hacemos amistades y creamos vínculos sólo comentando nuestras casas.
Acaso no se crean vínculos en la blogosfera? Es como si los blogger fuéramos todos buena gente y los que están en los chat no...
Quien te garantiza a ti que no se creen relaciones entre los escritores de distintos blogs?
Al fin y al cabo, desde blogger se puede llegar a crear fuertes amistades, vinculos y ¿por que no? relaciones.
Es como un chat, pero desde la literatura... no?
Jajja, no me hagas caso mi niña que hoy estoy algo rancia... Será este aburrimiento que me mata.
Un abrazo gordo gordo...
Besitos mediterráneos.
Cariño...en ningúnnnn momento digo que yo pienso que eso puede ser así.Claroooo que puede pasar eso que tú dices, por supuesto!!!!Yo solo escribo..pero no quiere decír que rece con eso o...si, en este caso no,uno puede encontrar el amor aquí porque no??Lo malo es que esta mujer, iba con unas miras hacía su bolsillo imposible de superar jajajajjajaja. Peroooo eso no quiere decír que se pueda encontrar el amor de tú vida aquí, clarooo que sí.?Millllllllllllll besitosssss galitaaaaaaaaaa corazónnn bonitoo !!!
EliminarSuprimir
Qué cosas, Midalita. La sopa de todos los días.
ResponderEliminarUn millón de besos
Según parece suele pasar, son las cosas de los interneses. Si se fanfarronea en persona, por internet ni digamos. Lo de te quiero por tu dinero es de toda la vida de dios.
ResponderEliminarSaluditos.
Los ojos y la cara son el reflejo del alma. Los actos de las demás personas repercuten en nosotros para bien o para mal, y en el caso de Eva fue para bien y para Elisa aunque no lo parezca también, la vida le dio una lección para aprender.
ResponderEliminarAqui ando con lo dientes, bien, se van colocando, lo j...son los pinchos que me tienen la lengua destrozá, pero bueno, con humor y paciencia.
Besotesssss!!!
Qué crueldad con la pobre Elisa, además los dos, recordándole la lección para que no se le olvide. Le deseo mejor suerte a ella en su próxima cita y que valore algo mejor lo que tiene delante, antes de dejarlo marchar, de nuevo...
ResponderEliminarMuy divertido, muchos besos midala!!
Me encanto que siguieras la historia, bien por Juan, tuvo suerte de conocer una gran mujer
ResponderEliminarElisa otra vez sera....
Un abrazo
Que penita, hoy digo el chite de dos hombres, estan tomando una cerveza, y pregunta uno al otro, oye, tu mujer ¿porque se caso contigo por amor o interes? le contesta, por amor, porque interes no tiene ninguno jajjaj. Desafortunadamente se confunde las cosas. muak
ResponderEliminarMuy mal por parte de Juan, restregale lo que pudo ser y no fue...soy de la opinión, que no hay que machacar, sino dejar las aguas que discurran placidamente...me ha encantado el texto como siempre...eres una artista en estos relatos...un besote.
ResponderEliminarLos tres me parecen patéticos.
ResponderEliminarDe verdad.
Dar lecciones de moral está al alcance de muy poca gente.
Besos.
Imagino que esta historia ha de ser una de tantas.
ResponderEliminarAunque en la vida no virtual, también ocurren estas cosas...
Que sí, que sí.
Besos, Midala.
¡Has conseguido llegar a la moraleja de la historia!... ¡Bién resuelto!... ¿Habra una tercera?...
ResponderEliminarUn abrazo.
Mi querida amiga, tienes un premio en mi blog, en honor a los escritores y poetas.Te espero en casa
ResponderEliminarTu amiga
Sor.Cecilia
Ya, ya me acuesto, que si no me riñes !jaja!!
La mentira tiene paticas cortas y no hay nada oculto debajo de sol...
ResponderEliminarEl amor, es amor, ya sea por internet, o tocándose las manos, el problema es saber lo que es EL AMOR, creo que su exacta definición se va borrando de las muestras de ADN.
En fin, que te dejo mi siempre abrazo y si amiga, a pesar de todo, hay que soñar.
Cuídate mucho, Midala
He usado "parte" de este relato como inspiración para mi ultimo post de Mildavia,ya digo que parte porque es mas como el tema de fondo y no el escrito en sí, porque ademas siempre se meten mas cosas e historias que se cruzan.Quiero pensar que este relato es ficción,como el resto y que te gustará la replica con humor (y un poco de mala lexe) que he escrito.
ResponderEliminarSalu2
Milú