Mientras la ciudad duerme (II parte)

Paco estaba ese día triste pero pronto volvió a ser el mismo. Volvimos a retomar nuestra relacción y yo nunca en la vida le comenté nada. Ni que le habían mandado un mensaje ni que sabía que algo había pasado con la compañera nueva. Ojos que no ven, corazón que no siente. Esa fué mi táctica. Dejarlo pasar e intentar seguír con nuestra vida, aunque confieso que a veces...me daban ganas de matarlo!!

Paco...miraba a su mujer y había veces que no se creía lo que había visto aquella noche. El se había levantado, no podía dormír, y se había encontrado a su mujer, mirandole el móvil cuándo llegaba un mensaje. Se puso muy tenso y no sabía cuál iba a ser su reacción, pués él ya sabía de quién era el mensaje y ...más o menos...sabía lo que diría. Se fué directamente a su habitación y sacó del bolso de su mujer su movil. Llamó a su amante por teléfono y le dijo que no mandara ningún mensaje más al movil, pués estaba en manos de su mujer.

Al día siguiente, acordamos que no volveríamos a usar el móvil nunca más. Seguimos con nuestra relacción, aunque a ojos de mi mujer, creo que jugué muy bien mi papel. Dije que mi nueva compañera se había marchado de la empresa y ella se sintió tranquila. Eso es lo que pretendía. Qué bajara la guardia y no me vigila más.Creo que lo logré. Le hago la pelota diariamente y creo que ella ya está tranquila. Yo, por mi parte, si os interesa saberlo, sigo con mi vida. No era la primera vez ni será la última. No quiero renunciar a tener una amante, y menos si le llevo yo 15 años. Tampoco quiero dejar a mi mujer. Ni a mis hijos. Mi mujer es una buena esposa y una buena madre, pero mi amante me da cosas que ella no me da. ¿Lo entendeis verdad?. Tres, es el número perfecto para llevar el matrimonio adelante, siempre y cuándo...sea el hombre el que sea infiel!!!!!!!!!!!!!!!

-Sin comentarios. Este personaje me salió...un poco "personajillo" :):):)