Todos los días hago el mismo recorrido. Y a la misma hora. No importa las cosas que tenga que hacer ni lo importantes que sean, mi prioridad, es ir allí a diario. Nadie lo entiende, todos me recriminan el que acuda ¿quienes son para opinar?¿qué saben de mi dolor?. Hablar es muy fácil...pero ponerse en mi lugar, muy dificil.
A veces, te llevo gominolas, como cuándo eras pequeño...y otras te llevo juguetes tuyos de tu niñez...como si tú te enteraras de lo que yo te llevo...
Tú y yo eramos dos almas gemelas. Siempre fuiste mi niño pequeño y te amé más de lo que está permitido amar. Reimos mucho y lloramos más, aprendimos juntos que la vida no es fácil y a ella nos enfrentamos...teníamos tantas esperanzas...nos imaginabamos nuestro futuro juntos, yo cuidando de tí y tú de mí...pero aprendimos que la vida tenemos que vivirla día a día, y disfrutarla cada segundo. Cuándo tú te fuiste, me dejaste desgarrado el corazón y el alma. La vida ya no tenía sentido. Era muy cruel que un hijo se vaya antes que una madre. Mi vida dejó de importarme, tan solo te echaba de menos y quería estar contigo.
Todo mi entorno se rompió y mi propia alma se desintegró. Nunca pensé que tendrías que marcharte y dejarme, que lucharíamos contra una enfermedad y que perderíamos la batalla.Hoy, soy una de esas personas, que viven en la calle, a las que llaman locas, pero no estoy loca, solo estoy rota de dolor. Tú te fuiste y perdí mi trabajo, pués no podía ir a trabajar, al no ír a trabajar no podía pagar la hipoteca...el banco se quedó con la casa. Daba igual, lo mucho o poco que tenía, lo más importante eras tú. Mis cuatro cosas,las más importantes, las metí en una bolsa y dejé nuestro hogar, con tu foto colgada al cuello y me fuí a vivír a la calle. La vida me había golpeado fuertemente y todo se pone en contra. Pero esta contrariedad no me duele, me duele la tuya...
Todos los días hago el mismo recorrido. Voy al cementerio y te llevo gominolas. Sé lo mucho que te gustaban. Pasó muchas horas allí contigo, pués es donde mejor estoy, a tú lado.Noto tu presencia y me gusta hablarte y contarte las penurías de mi vida sin tí. Ojala llegue pronto el día en el que me pueda reunír contigo!No tenía a nadie más que a tí y mi trabajo y ya no tengo nada...que vida más cruel nos toca vivír a veces...te echo tantooo de menos...
- Mamá mamá !!!!!!!!!
Dios mío...me había dormido y había tenido la peor pesadilla que se puede tener...
Abrí los ojos temblando de miedo...tiritaba y tenía frío. Era de noche.A mi lado había una pareja joven con su hijo pequeño que no paraba de tirarle del brazo a su madre para que mirara unos juguetes y de su garganta salía una voz angelical que gritaba sin cesar...."mamaá, mamaaaaaaa´!! Miré a mi alrededor y no había nadie en la calle, solo yo tumbada en el banco. Mi peor pesadilla era real....
Amor y muerte, nada más fuerte.
Muchas de las cosas que escribimos son fruto de la inspiración del momento,pero nos metemos tan de lleno en ellas que,como en este escrito tuyo,se nos desgarra el corazón.
ResponderEliminarDebe ser lo peor del mundo perder a un hijo.
Dee verdad espero que esto sea sólo una inspiración nada real.
Me voy emocionada hasta la médula.
Besos.
Tranquila Marinel...es fruto de algo que oí en la televisión.Pero me parece un tema espantoso y horrible que no me veia capacitada para escribirlo.Mil gracias y mil besitos
ResponderEliminarCuando veo a una persona viviendo en la calle, sea hombre o mujer, siempre me pregunto cual será su historia, historia como la que has contado, como se dice, sacado de la vida real, a veces, es más real lo que imaginamos que la realidad que vivimos.
ResponderEliminarUn abrazo
Sólo fue feliz por unos segundos.
ResponderEliminarEs lo peor sobrevivir a un hijo, no quiero ni imaginarlo.
Besos!!
Mi querida Midala: ESpero y deseo fervientemente que las pesadillas no se cumplan. No quiero ni pensar lo que debe de ser para una madre perder un hijo. Te debe de romper la vida totalmente.
ResponderEliminarMe ha impresionado tu escrito, por cierto, muy bien escrito.
Brisas y besos, Midalita.
Malena
Menos mal que es fruto de la inspiración... se me ha congelado el alma...
ResponderEliminarHe llorado y todo..
Debe ser lo peor del mundo...
Yo pasé por algo , ni parecido, obviamente, pero si perdí un bebé... antes de nacer.. a los pocos meses de gestación y es la peor situación que he tenido que superar...
Creo que no la he superado, ni lo haré jamás... aunque tenga otros hijos en el futuro... eso, eso no se olvida...
El sentimiento de madre es algo tan especial, que no hay dolor mas grande que perder a tu carne...
En fin.. la vida es asi.
Besitos preciosa...
Si, la especie no está preparada para esa inversión de tiempos; realmente desgarrador el panorama que plantea tu texto,
ResponderEliminarLo has hecho con mucha crudeza, parecía que el tema no amerita otro comportamiento argumental, Ante la más ruda crudeza del destino.
Muy buen cuento, me gustó el final, con esa pesadilla que se llama despertar.
Gran abrazo Midala, muy emotivo pasar por acá.
Perder un hijo es lo peor que le puede suceder a una madre .
ResponderEliminarMi hijo junto a sus amigos tuvieron un terrible accidente de coche .
Perecieron dos , uno de ellos además era vecino .
Mi hijo quedó en como inducido ...
es algo que una madre no puede superar .
Mi " padre " por llamarle de alguna manera , nos abandonó cuando yo contaba tan solo quince meses ( la menor de cuatro hermanas ) . NO sé que le llevó a vivir en la indigencia , pero un día lo encontraron tirado en la calle a causa de un infarto .Entonces nos enteramos que él " vivía " en la calle .
La protagonista de tu relato no tenia nada que perder .
Había perdido toda motivación por la vida .
Y es que a veces la realidad se convierte en la peor de las pesadilla .
Muchos besos
Midala, se me ha partido el alma, yo, sufro mucho con la lejanía de mi hijo, su ausencia, pero esta VIVO, vivo, cuantas madres lloran a sus hijos perdidos, y yo a veces me creo que no voy a soportar....
ResponderEliminarUn abrazo y ojalá bloguer me deje dartelo.
P.D: Si pasa el comentario, por favor dile a Ion que no he podido comentarle, esto sigue fatal y son pocos los que pasan.
Querida Midala, puede habarlo oido, pero haz hecho un relato exquisito describiendo entorno y sentimientos. Un abrazo
ResponderEliminarA veces mantener los ojos cerrados, aunque sea de manera metafórica, es la única forma que tiene el ser humano para sobrevivir a la realidad. A veces resulta difícil mirar la vidad frente a frente, es un ejercicio diario de valentía.
ResponderEliminarMuchos besos y un abrazo
Hola Midala, desgarrador relato, has conseguido plasmar muy bien la mayor angustia que puede sentir un ser humano.
ResponderEliminarUn abrazo.
Pues yo igual de lacrimógena que las demás, aquí estoy secándome las mejillas. Lo peor es que ya me había dado la máscara de pestañas. Y es que emocionas, princesa. Nos llevas de paseo con la tristeza más cruel que es perder un hijo.
ResponderEliminarUn abrazo y me alegro de que solo sea producto de una inspiración televisiva.
Hay sentimientos muy fuertes y decididamente el texto logra impactar a quienes lo leen y conmoverlos hasta la identificación breve y dolorosa.
ResponderEliminarFascinante relato y efectos.
Saludos.
Gracias Midala, ahora voy a su casa a decirle que si salió.
ResponderEliminarBesos!
Sobrevivir a los hijos es lo peor, si duro es sobrevivir a nuestros mayores, perder a los pequeños, es tan doloroso, que solo quien lo padece sabe lo que es.
ResponderEliminarsobrevivir a nuestros mayores ya es doloroso, sobrevivir a nuestros pequeños es injusto, es lo peor que nos puede pasar, y solo quien lo sufre, sabe lo que se siente.
ResponderEliminarsobrevivir a nuestros mayores ya es doloroso, sobrevivir a nuestros pequeños, es lo peor que puede pasar. Y solo quien lo sufre sabe de verdad lo que se siente.
ResponderEliminarEste relato es uno con los que nadie quisiera identificarse, cosa que en un relato ordinario sería negativo, pero en este, implica que cumple su cometido.
ResponderEliminarHola Midala, es una triste historia, en la que logras transmitir ese dolor infinito de perder un hijo, el ser más preciado sobre la faz de la tierra...QDTB, recibe un fuerte abrazo.
ResponderEliminarSe me estremeció el corazón al imaginarme en ese lugar. Supongo que ya nada debe ser igual luego de la pérdida de un hijo; sólo queda el vacío, un doloroso y frío vacío...
ResponderEliminarAy, Midala, ¡Cómo lo has escrito, toreraaaaa!
Un beso enorme!!!
Es lo peor que le puede pasar a una madre. No quiero ni imaginar semejante dolor, que ya leyéndote le he sentido demasiado. La vida es muy injusta a veces, pero solo nosotros podemos luchar contra ella, tenemos un poco de poder. Aunque solo sea el de elegir como seguir viviendo… Cada uno lleva su dolor a su manera y nadie puede decir lo que es mejor o peor. Un bessito
ResponderEliminarMi niña, te acabo de leer, pobrecitaaaa!!! Te lo haré otra vez. Algunas veces, hay que pasar por algunas cosas por alguna razón. No desesperes ese ojo sanará, pero tranquila, pediré por ti.
ResponderEliminarHa sido un día muy emocionante, muchos blogs nos hemos unido y conocido. Me he quedado encantada.
Besos!
La vida es la vida, con su crudeza y dolor, con sus alegrías y triunfos; infortunadamente pocos o nadie quiere ver estos cuadros desgarradores, pero existen, y para ello está la Literatura, para recordar a la Sociedades, ¡a todos! Lo que hemos hecho con la tragedia de los demás.
ResponderEliminarUn abrazo y felicitaciones.
Millll gracias a todos por pasaros a leer este...triste relato.Hoy una noticia en la radio que...bueno...llego este relato con ella.Me parecia que no iba a ser capaz de ponerme en su lugar,niiiiiiiiiiiiii por asomoooo,esta clarisimo,pero intenté plasmar un poco de lo que se debe de sentir,solamente...un poco.
ResponderEliminarmilllllll gracias y mil besos